SIMPATICOS ORIGENES DEL CRISTIANISMO

DIOS TE VA HA CASTIGAR.
El "slogan" de todas las religiones.

El cristianismo es una religión surgida del judaísmo, y los judíos fueron los únicos que hicieron lío y medio por su religión, cuando fueron conquistados por el Imperio Romano, es por esto que los romanos no tuvieron otra opción que arrasar con Jerusalén, para que, de una vez por todas, este pueblo de fanáticos se mantenga quieto. Funcionó por casi dos mil años. Pero ya había otro fanatismo disperso por ahí, el cristianismo. Independientemente de todo lo positivo que pueda tener esta religión, es una religión intolerante y fanática, como toda religión revelada de raíz monoteísta. Esta religión, el cristianismo, convirtió y agredió a todo culto que no estuviera directamente relacionado consigo mismo, y, llegado cierto punto, también agredió al canon no aceptado por la autoridad. Son ellos, los cristianos, los que convirtieron a todo lo no relacionado con su culto en ‘paganismo’, es de este paganismo, ya saben, los eternos y simples cultos de fertilidad campesina, que surgen algunos de los principales íconos que después se achacarían a un satanismo que no existió hasta finales de la edad media, muy débilmente, y algún esnobismo del XVII.
Creo que fue Tomás de Aquino quién dijo ‘Quisiera algún muestra de la presencia del diablo, para así estar seguro de la existencia de Dios’, obviamente no lo debió decir así, ya que es medio herejía. En cambio, el muy creyente Martín Lutero, tuvo una confrontación cara a cara con el señor de las tinieblas, el macho le arrojó un tintero. Supongo que Satán huyó despavorido, ‘Uaaaaaah, ¡tinta!’. Recuerden que la iglesia consideraba una tarea sagrada la de cultivar viñedos para hacer vino, parece que también cultivaban otras hierbas. Durante el principio de la iglesia cristiana, había tantos ritos paganos, que el paganismo, no un inexistente satanismo, era el verdadero enemigo de la purista religión. Una vez establecido el cristianismo en los círculos del poder romano, de oriente y occidente, el enemigo fueron las muchísimas doctrinas cristianas que no se adaptaban al canon establecido por lo vendría a ser la religión ortodoxa, para que, luego, ese lugar fuese ocupado por el catolicismo actual. Así, el enemigo era el arrianismo, el nestorianismo, y un sinfín de ismo cristianos esparcidos por doquier—de acuerdo a Marco Polo, alguno de estos ismos llegó hasta la mismísima catay, eso es la China. Hasta la China.